El granizo es un tipo de precipitación (junto con la lluvia y la nieve) que se caracteriza por la forma en que cae: bolas de hielo irregulares.
El granizo se produce en algunas tormentas, en unas nubes llamadas cumulonimbos, que ya están cargadas de agua; al pasar por ciertas corrientes de aire más frío, las gotas de agua se van cristalizando por la bajada de temperatura, formándose pequeñas bolas de hielo que cada vez se hacen más grandes, debido a la humedad y al frío. Cuando estas bolas llegan a un determinado tamaño, caen por su propio peso en la tormenta.
Normalmente las bolas de granizo son pequeñas, ya que no pasan de unos milímetros de diámetro.
El granizo se produce en algunas tormentas, en unas nubes llamadas cumulonimbos, que ya están cargadas de agua; al pasar por ciertas corrientes de aire más frío, las gotas de agua se van cristalizando por la bajada de temperatura, formándose pequeñas bolas de hielo que cada vez se hacen más grandes, debido a la humedad y al frío. Cuando estas bolas llegan a un determinado tamaño, caen por su propio peso en la tormenta.
Normalmente las bolas de granizo son pequeñas, ya que no pasan de unos milímetros de diámetro.
Pero si coincide con la corriente que mantiene durante un tiempo a las bolas, se van creando esas capas de hielo unas encima de otras hasta llegar a tamaños especialmente grandes.
En tormentas muy intensas, el granizo puede aumentar de tamaño espectacularmente, si hay fuertes corrientes ascendentes, ya que la bola de granizo puede mantenerse más tiempo en la atmósfera, disponiendo de mayor crecimiento; así el peso puede ser mayor, y llegado a cierto punto también cae.
En tormentas muy intensas, el granizo puede aumentar de tamaño espectacularmente, si hay fuertes corrientes ascendentes, ya que la bola de granizo puede mantenerse más tiempo en la atmósfera, disponiendo de mayor crecimiento; así el peso puede ser mayor, y llegado a cierto punto también cae.
Las consecuencias de una tormenta de granizo de gran tamaño pueden derivar en daños a cosechas enteras, a automóviles, estructuras de cristal , o incluso lesionar a una persona!
Como curiosidad, la bola de granizo más pesada, cayó en Kansas (EEUU) en Septiembre de 1970 y pesaba 770 gramos!
La bola de granizo más grande cayó en Nebraska (EEUU) en el año 2003 y su diámetro era de casi 35 cm!
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